jueves, 21 de julio de 2022

 

Recuerdo cuando leía a un filósofo como Savater, me agarro en una etapa chévere pero difícil de mi vida, la adolescencia. Recuerdo, lo chévere era el lenguaje sencillo de Savater, de fácil comprensión para una persona de mi edad, creo con Hermann Hesse pasa algo parecido no solo recurre a la imaginación sino que no es una especie de Immanuel Kant o Leibniz que desarrollan conceptos filosóficos complejos sino de fácil comprensión en este caso para los jóvenes, fue grato saber que Hermann Hesse es uno de los escritores más leídos por los jóvenes en mi país en algunos colegios algunos de sus escritos es lectura obligada, eso habla bien de algunas instituciones colombianas de bachillerato que enseñen a Hesse, creo que los jóvenes desarrollen conceptos con autores como él es de valorar. A Hesse teníamos que leerlo, yo personalmente leí a Siddhartha, el lobo estepario que fue de los tres el que más me gusto y un libro donde Hesse mostraba su carácter pacifista y como un intelectual comprometido con la libertad fue de los primeros que denuncio la amenaza del nazismo en la sociedad alemana. Algunos le atribuyen una relación con lo New Age inclusive con el consumo de alucinógenos pero en mi opinión eso es reducir a algo muy simple a Hermann Hesse, el conocía de culturas orientales no por el consumo de alucinógenos como algunos falsamente creen sino a su amplio conocimiento sobre Asia, sus viajes a la India y Ceilán también a su madre que era de origen indio. Comprender la filosofía oriental y el budismo bajo nuestra óptica cristiana no es fácil pero leyendo a Siddhartha es una excelente forma de comprender a Oriente bajo una mirada de occidente lamentablemente yo caigo mucho en eso y es que la mayoría de mis autores son occidentales y me forme bajo una óptica occidental, no es que sea malo, es una forma de ver el mundo pero quizás el poco acceso de autores no occidentales me ha limitado mi visión del mundo pero no me siento mal por esto debido a que trato de aprender lo bueno de occidente y sus aportes no solo la carga negativa que suelen darle algunos.

El lobo estepario, es un libro fascinante que te ayuda a comprender al ser humano, del porque el humor nos hace humanos, del porque nos permite tener un antídoto contra lo malo de nuestros gobernantes, criticar los totalitarismos vengan de donde vengan. En el lobo estepario comprendí que todos somos eso, unos animales racionales que tenemos que domesticar nuestros bajos deseos e instintos, que tratamos de ser racionales, pensantes como una forma de sublimar esa parte primitiva que todos llevamos en nosotros. Al final que somos, un producto de la historia, de los hechos de las circunstancias pero ante todo de nuestros actos y aunque tratemos de dejar esa parte salvaje siempre es una parte de nosotros que de alguna forma nos persigue. El lobo es un animal maravilloso recuerdo cuando leí a San Francisco Asís y su famoso relato como logro domesticar a este maravilloso animal, es una animal solitario que le canta a la luna en las noches pero que desarrolla un liderazgo en la manada cuando Hermann Hesse toma a este animal no se equivoca en compararnos con un lobo, nos parecemos tanto como el lobo, su instinto cazador, sus salidas nocturnas, etc. Recuerdan, esa historia maravillosa de Kevin Costner, “danzando con lobos”, que maravilla de animal, no se equivoca Hesse nos parecemos mucho a este hermoso animal.

Me entere Hermann Hesse es quizás el autor alemán más leído y repito se nota un amplio conocimiento. Yo siempre he tenido fascinación por la cultura alemana, sus grandes mentes, sus aportes científicos, literarios y filosóficos valoro mucho al pueblo alemán como un pueblo organizado y eficiente lo que más me impresiona es la forma como llegaron a acordar lo fundamental después de librar muchas batallas, con miles de vidas ahora que el concepto tonto de “vivir sabroso”, se ha vuelto de moda, no sobra recordar que antes de vivir sabroso, se debe pasar por momentos duros y decisiones difíciles no es solo tener un abanico y quedarse en una hamaca, creo es mucho más complejo no creo fue fácil para los japoneses que para “vivir sabroso” antes tuvieron que doblegar su dignidad como pueblo y aceptar que su emperador no era un ser divino fue una decisión fácil, fue difícil. No, es fácil, ni para nosotros los colombianos, ni para ningún pueblo el “vivir sabroso”, se necesita de momentos duros y decisiones difíciles como la vida de la gran mayoría de seres humanos a menos que seamos seres iluminados y esos solo Jesús, Buda, y Mahoma, mejor dicho contados con los dedos de la mano.

Valoro de Hermann Hesse, no solo su lenguaje simple, sus conceptos claros, su compromiso con el conocimiento y la libertad sino que al igual que Einstein su sencillez que está relacionado con un carácter humanista la gente cree que estas mentes brillantes son seres complicados, tienen problemas como todos nosotros y tienen que solucionarlos como todos pero desarrollan un carácter humanista que les permite comprender a muchas personas. Comprender a otros se necesita de un proceso de aprendizaje del porque somos así, se necesita de ampliar nuestra visión para tratar de comprender al ser humano y en lo posible tratar de ver más allá y Hermann Hesse era eso…

Alvaro Támara Higuera

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