domingo, 4 de octubre de 2020

El 18 de octubre de 2020, se celebraran las elecciones presidenciales y legislativas en Bolivia después de la renuncia del expresidente, Evo Morales. Las elecciones estaban inicialmente para mayo pero debido a la pandemia se aplazó la fecha para octubre, son unas elecciones muy importantes para Bolivia porque definen su futuro político del país sino porque se mostrara la fortaleza de tres proyectos políticos en Bolivia. Una izquierda popular, campesina e indígena del MAS. Un centro, moderado, urbano, republicano y una derecha empresarial de la región más prospera de Bolivia, Santa Cruz. Según, las encuestas, el proyecto del MAS es que tiene mayor arraigo popular pero no como en años anteriores donde ganaban con mayoría absoluta. El proyecto del candidato Camacho, de Santa Cruz, es muy diferente al del Carlos Mesa, por eso no se esperan alianzas en primera vuelta, lo único que los une es que se oponen a Evo Morales y el MAS, pero son diferentes. Personalmente, me identifico, con el proyecto político de un candidato moderado como Carlos Mesa, es un proyecto, muy urbano, de la clase media boliviana. Es un proyecto republicano, garantista en derechos y respetuoso con el indígena además Carlos Mesa, proyecta un perfil intelectual bastante adecuado. Repito, me gusta el proyecto político de Carlos Mesa y considero es el más adecuado para Bolivia. En cambio, el proyecto de Camacho, de Santa Cruz, es apoyar todo lo que rechazan amplios sectores indígenas en Bolivia, no convoca, es un proyecto que divide, es de un ultraconservadurismo y un enfoque empresarial en Bolivia, que es bueno recordar fue lo que produjo que la población boliviana se inclinara por mucho tiempo por la izquierda. Me gusto, que la actual presidente, Yáñez, haya retirado su candidatura presidencial porque no tenía ni pies ni cabeza, la actual presidenta, fue elegida de manera temporal para cumplir una vacante y ella prometió, que no se presentaría a las elecciones presidenciales e incumplió, pero es bueno decirlo, rectifico, aunque dicen, su fuerza electoral, va a favorecer a Camacho, y no mucho a Carlos Mesa.

Me atrevo a creer, es probable Bolivia tenga una segunda vuelta, sería mejor un balotaje y que la persona que gane tenga un respaldo importante pero espero que los bolivianos elijan bien. Bolivia, un país rico en recursos naturales, merece un buen gobernante, alguien que una al país, que convoque, trabaje por todos los bolivianos. Espero, que Bolivia, elija de la mejor manera y les deseo éxitos en los próximos años. La estabilidad de Bolivia, es buena para todos…

Alvaro Támara Higuera

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