domingo, 13 de octubre de 2019


El 2 de octubre se celebran, los 150 años del nacimiento, de “Mahatma” Gandhi, un líder político pacifista que fue determinante para lograr la independencia de la India del Imperio Británico. Son pocos los casos, donde una persona, en este caso, derrota a un imperio, uno de ellos, es Gandhi, que lo hizo con mucha paciencia e inteligencia, el otro, de manera chistosa, digo yo, es Maradona, cuando convirtió en México 86, con el mejor gol de la historia de los mundiales, a los ingleses, obviamente es una broma mía, pero muestra lo difícil, que fue la proeza de Gandhi y lo hizo, más sorprendente aún, sin disparar un solo disparo, todo lo contrario, con la fuerza del amor y apelando a la no violencia, demostró que su lucha era acertada. Miren, los imperios, son siempre iguales en cualquier momento de la historia, solo importa una cosa, lograr sus objetivos al costo que sea, pasando por encima de lo que sea, su poder se expresa de manera arrogante y salvo excepciones, no muestra ningún signo de debilidad. Solo, importa, los deseos del imperio, y se logran más que por la razón, por la fuerza. Cuando un imperio expresa su motivación o deseo, es muy difícil que rectifique, solo en nuestra época, los vietnamitas, lograron derrotar a un costo muy alto, a los estadounidenses, está derrota, la única de su gloriosa historia militar, motivo, rectificar y repito, esto es muy raro, lineamientos de la política exterior, norteamericana. Repito, para que un imperio, rectifique, difícil, pero en casos, muy raros, puede ocurrir…

Si, Gandhi, un muchacho, bajito, de apariencia escuálida, y algo enfermizo, miembro de la elite local de su país, logro lo que parecía imposible, enfrentarse a unos de los imperios más grandes y poderosos, en toda la historia, el británico y lo que es, más difícil, o casi, imposible, derrotarlo. Gandhi, era un joven educado, su profesión era abogado, fue educado, en una universidad británica, esto es importante, porque conocía, la capital del imperio británico, su dinámica, como se tomaban las decisiones y cuáles eran sus motivaciones. Su madre, cuentan, le enseño valores muy importantes, como el respeto a la diversidad cultural, esto fue determinante para formar el pensamiento, de Gandhi. Su, paso, por Sudáfrica, fue importante, para que alejado de su placida vida como miembro de la elite local, se diera cuenta, de la exclusión y discriminación, de la comunidad india en ese país, donde la situación, aunque mejor que la población local afro era mejor, no era la más óptima y eran tratados como ciudadanos de segunda clase. En algún momento, de su vida, para Gandhi, era importante su pertenencia como integrante del Imperio Británico, fue camillero en la Guerra Bóer, de lado británico, para el en ese momento sentirse incluido, creía era importante para mejorar la situación de su gente dentro del imperio, lo que no sabía, hasta después, es que siempre serian vistos como ciudadanos de segunda clase y el sufrió persecución, de los blancos en Sudáfrica, lo que lo motivo a pensar que siempre serian vistos como seres inferiores de seguir dentro del Imperio Británico. Regreso, a su país, no para asumir los negocios de su padre, recordemos que venía de una casta privilegiada de comerciantes. No, Gandhi, venia determinado, a lograr la liberación de su gran nación. Organizo, marchas pacíficas, siempre pacíficas, lucho contra impuestos injustos, llego en algún momento, hasta entrevistarse con la misma Reina del Reino Unido, inspirado por las ideas pacifistas de Thoureau, logro finalmente, la independencia de la India, pero no logro detener su separación, entre una nación hinduista, India y una nación musulmana, Pakistán, es quizás esta separación, su más grande frustración. En todo caso, inspiro a muchos en el mundo, su lucha pacífica motivo a personas, como Martin Luther King en los Estados Unidos, que lo admiraba. Es Gandhi, sinónimo, de pacifismo y no violencia, también, uno de los personajes más admirados en la historia de la humanidad.

Qué bonito, seria en un país marcado por la violencia como Colombia, tener un líder que siga los lineamientos de Gandhi, que inspire una lucha pacífica y enmarcada dentro de la no violencia. Un líder, que fuese una guía moral, que dictara el camino correcto, que, sin apasionamientos, diga que está bien, para nuestro país. Colombia, necesita, un líder moral, que le muestre el camino correcto, que no esté contaminado de los intereses particulares, que piense, en el bienestar general y lo guie por el camino correcto. Ese, líder, que no necesariamente, debe tener un Premio Nobel de Paz, le hace falta a Colombia, alguien que sepa conducir a la nación, por el camino correcto, que inspire tanto respeto, como autoridad moral, que ayude a mantener la paz en Colombia. Seria, bueno…

Alvaro Támara Higuera


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