jueves, 26 de octubre de 2017

Bueno, lo primero que debo decir, es que la situación del indígena hasta hace muy poco, era muy mala, sus derechos humanos más básicos eran vulnerados además que un sector de la población los trataba muy mal. En 1991, gracias a la Constitución Política, la situación del indígena mejoro, sus tradiciones ancestrales fueron reconocidas, se les respeto su carácter de ciudadanía y se les brindo un espacio dentro del escenario político colombiano, aunque no resolvió injusticias históricas si mejoro su situación sin tampoco llegar a afirmar que era lo ideal.

Si me preguntan, que diezmo a la población indígena en el continente, depende del lugar donde se ubiquen, en países de mayoría blanca, fueron muy crueles con el indígena, se les trato de salvajes y casi se les extermino hasta convertirlos en poblaciones minoritarias convirtiéndose en una masacre que se calcula en más de cien millones de personas, todo un genocidio. En nuestro país, la situación era muy difícil, se le diezmo pero no se llegó a considerarse salvaje e inclusive se le considero súbdito de la Corona, pero igual como en todo el continente el método científico o la enorme superioridad científica de los europeos en armas además de enfermedades diezmaron terriblemente a los indígenas. Con la independencia de Colombia, la suerte del indígena, no cambio mucho, porque el criollo, miraba al indígena e inclusive al mestizo con enorme desconfianza y esto perduro hasta bien entrado el siglo XX, y hoy todavía persiste en algunos sectores de la población colombiana está enorme desconfianza contra el indígena, lamentablemente a pesar de los avances en países desarrollados, todavía el indígena en países como Australia o Canadá, son las sociedades más pobres y menos desarrolladas pero en los últimos años ha mejorado está enorme desigualdad e injusticia contra el maorí o los aborígenes canadienses.

Por mucho tiempo, en países de población mayoritariamente blanca, como Australia, Nueva Zelanda o Canadá, la situación del aborigen era muy difícil, tan solo en las últimas décadas se ha reconocido la enorme injusticia contra la población aborigen. Los gobiernos de Australia y Canadá, han avanzado bastante en el reconocimiento de su población aborigen, en Australia, se plantea un plebiscito a realizarse en una fecha próxima para reconocer los derechos de sus aborígenes y en Canadá, quizás el país más avanzado en esta materia, se conformaron territorios autónomos grandes, donde el indígena tiene la opción de manejar autónomamente su destino, es así, que crearon “Nunavut”, un territorio de los indios inuit, inclusive mucho más grande que Colombia. Confieso, que mi interés, con la reivindicación de los derechos de los indígenas, viene de una experiencia paradójicamente de sociedades blancas más avanzadas que nosotros. La experiencia, de Australia y Canadá, en esta materia, considero que es un estado de conocimiento más alto y una consciencia mayor frente a la situación del aborigen, quizás como lo dijimos porque el casi exterminio del indígena fue mayor en esos países, se desarrolló una consciencia mayor para su protección pero deseable en sociedades donde se pregona una igualdad para todos. 

Cuando los europeos llegaron lo que para ellos era un nuevo continente, no se encontraron solo con un indígena aparentemente menos desarrollado, está visión extendida por mucha gente es equivocada porque al momento de la llegada del europeo a estas tierras, estos ya eran más de cien millones de personas, eso aunque no lo crea era mayor que la población de Europa en ese momento y si existían civilizaciones clásicas con un mediano desarrollo, como los mayas, los aztecas y los incas. Sevilla, la ciudad española más grande en ese entonces, tenía casi quinientos mil habitantes y se dice, que Tenochticlan, la capital azteca, tenía la asombrosa cifra de un millón habitantes, para darles una visión era tan grande como Roma, en sus mejores días. Ahora, particularmente los aztecas, no eran tan pacíficos como se podría creer, era un pueblo de guerreros, que odiaban sus enemigos que le pagaban tributo pero que llego a sacrificar para sus dioses a miles de pueblos indígenas que fueron derrotados de todas formas este grado de sevicia, no justifica el exterminio del indígena que vino después.

En todo caso, después de saber las injusticias clarísimas contra los indígenas y su casi exterminio en los lugares donde el hombre blanco llego, considero que lo correcto es reconocer sus derechos como ciudadanos de la nación además de sus títulos sobre la tierra reconociendo por parte del estado colombiano las enormes injusticias que se cometieron a través del tiempo, pero repito llego a esa conclusión, después de mirar otras experiencias de sociedades más avanzadas, como Australia y Canadá, donde se han dado pasos aunque no completos para reconocer está verdad histórica. Soy consciente, quizás no exista la consciencia en mi país para manifestar esto, y considero que lo veremos gradualmente, pero es lo correcto frente a las enormes injusticias y casi exterminio del indígena en muchas partes del mundo.

Alvaro Támara Higuera


Facebook: Alvaro Támara Higuera
Twitter: @aethcolombia
Google +: Alvaro Támara Higuera
Pinterest: Kikeliberal
Instagram: Kikeliberal


1 comentarios :

Cordial saludo
Las comunidades indígenas en Colombia, si bien son sujetos especiales de protección Constitucional, distan de un goce efectivo de derechos.
El poblamiento muestra que el 90% de la población tiene linaje materno indígena y el 90% linaje paterno europeo.
De esta manera el censo indígena en Colombia según el censo 2005 visibilizó 1.392.623 personas pertenecientes a comunidades indígenas, lo cual indica un 3,43% de la población http://www.dane.gov.co/files/censo2005/etnia/sys/visibilidad_estadistica_etnicos.pdf
Siempre es muy interesante leer este blog, suscita reflexión y memorias sobre la realidad actual.

Reply